Hace 5 días. Voy a 15 metros de la playa a comprar la prensa. 12 y pico de la mañana. Un jaleo del copón: el panadero, el afilador, el de la pescadería, el que vende huevos (de gallinas), el que tapiza mecedoras, el que vende melones (no hablo de silicona), el de los cupones, los guiris a lo suyo comprando el Times no se qué, y todo lo demás. Y estos gaticos, tan felices. Y el resto, como Lapido, en La antesala del dolor. Si es que no sabemos disfrutar... Pues eso, ¿a qué sabe la ginebra? El mejor poeta del siglo XXI. Grande Lapido. Grandes, y pequeños, los gaticos.
Que pasa? que lo gatos iban borrachos como tu vecino, no?
ResponderEliminarjajajaja Es que si no es así, madre mia que aguante tienen los jodios, porque con tanto trajín...
saludos
Qué buena foto! A eso le llamo yo "pasar de todo".
ResponderEliminarun beso
Super chula la foto!! y mira que estaban tranquilos eh que no habia nadie que los despertara con el jaleo que debia haber jajaja
ResponderEliminarUn saludo
Los gatos son así, otra cosa hubiera sido de no serlo.
ResponderEliminarYa sospechaba yo que los gatos eran en realidad aves y ponían su nido en los bajos de las mesas de mimbre. Ahí está la prueba
ResponderEliminarave...cesar gatuno!!!
ResponderEliminarJo, que guay!!!
ResponderEliminarMira que se buscaron un buen sitio.
Es que a los mininos les encanta dormir.
Les encaaaaaaaantaaaaaaaaaaaa.
Miau.