Qué trabajazo hacer que les llegue la sangre a la cabeza... A mí me cuesta también, como a ti, pero lo de las jirafas no tiene parangón. Yo, en contra, visceralmente en contra, ya lo sabes. Y los jóvenes es que son poco reflexivos. Hasta que les toca, como al español ese que se escapó por pelos y ahora anda haciendo campaña en contra. Le tocó y pensó. ¿Cuándo pensaremos sin que nos toque?
¿y no se marean las girafas cuando miran desde ahi arriba?¿sufriran de vertigo?¿y como ven las cosas al mirar para abajo?ufff, me estoy marendo yo solo de pensarlo, a ver si es que me estoy quedando sin sangre en el "celebro"
Qué trabajazo hacer que les llegue la sangre a la cabeza... A mí me cuesta también, como a ti, pero lo de las jirafas no tiene parangón.
ResponderEliminarYo, en contra, visceralmente en contra, ya lo sabes. Y los jóvenes es que son poco reflexivos. Hasta que les toca, como al español ese que se escapó por pelos y ahora anda haciendo campaña en contra. Le tocó y pensó. ¿Cuándo pensaremos sin que nos toque?
Pue syo pensaba que uno se hacía intolerante con el tiempo, pero veo que ahora es al revés habrá que aprender a ser tolerante. Y punto
ResponderEliminarUnos zapatos rojos que te hagan bailar cuando te los pones
ResponderEliminar¿y no se marean las girafas cuando miran desde ahi arriba?¿sufriran de vertigo?¿y como ven las cosas al mirar para abajo?ufff, me estoy marendo yo solo de pensarlo, a ver si es que me estoy quedando sin sangre en el "celebro"
ResponderEliminarHola, soy el de siempre. Creo que falta un me entre A mí y cuesta. Pero vamos, sólo lo creo.
ResponderEliminarQué sarcasticos los dos últimos.
ResponderEliminarTokio es el mejor sitio para comprar zapazos, bueno, o por lo menos eso es lo que dicen en el libro...
ResponderEliminarEstaba segura que detrás de "¿necesitarán zapatos nuevos?" estaba esa canción.