Suma en una partida de ajedrez. En una maldita partida de ajedrez. Pasos cortos, saltos largos, extremidades ineficaces, música imposible, crujido dedicado, héroes cansados, tragos inagotables, separaciones imposibles, poderes ocultos. Y todo lo demás. Las mentiras, como las borracheras, heroicas e ineficaces, o, como dijo un día el hombre de la camisa verde, olvidables y tornillos en la pierna. Y el resto, tonterías.
¿Ser nosotros un día nada más?...
ResponderEliminar¿No es poco?... Pregunto;)
¡Un abrazo!
Y yo sin saber jugar al Ajedrez...triste de mí...
ResponderEliminarLas mentiras rara vez son heroicas
ResponderEliminarMar, las primeras personas del plural siempre son complicadas.
ResponderEliminarChicho, yo tampoco.
Leandro, viva la época heroica, viva la primera mitad de los 90.