Los viernes sin trabajo, una vez llegado el desempleo, son de limpieza.
De limpieza profunda. A saco. 6 horas a saco.
Y a eso de media mañana me encuentro siempre con la foto de la tía de Isabel. La historia de la tía de Isabel es en plan siglo XXI. De dramón familiar. De pelearse con el novio, y borrarlo hasta de las fotos. Porque en la foto, la parte derecha va a lápiz. Una de las pocas fotos que quedó era una con el presunto julandrón, el cabrón de arte mayor. Y se quitó de su izquierda el julay, y se pintó a lápiz. Y resultó que la tía de Isabel murió poco después de pelearse con el individuo. Para que veas lo que son las cosas.
¿Son posibles las alegrías sin incendios? Yo creo que no.
Que viva el fuego.
Los viernes sin trabajo, una vez llegado el desempleo, son de limpieza.
De limpieza profunda. A saco. 6 horas a saco.
Y a eso de media mañana me encuentro siempre con la foto de la tía de Isabel. La historia de la tía de Isabel es en plan siglo XXI. De dramón familiar. De pelearse con el novio, y borrarlo hasta de las fotos. Porque en la foto, la parte derecha va a lápiz. Una de las pocas fotos que quedó era una con el presunto julandrón, el cabrón de arte mayor. Y se quitó de su izquierda el julay, y se pintó a lápiz. Y resultó que la tía de Isabel murió poco después de pelearse con el individuo. Para que veas lo que son las cosas.
¿Son posibles las alegrías sin incendios? Yo creo que no. Que viva el fuego.
Vaya tragedia!
ResponderEliminar