domingo, 31 de enero de 2010

31 millones de dólares.


Al final, todo está marcado. Los números y la muerte, la envidia y las luces de colores. Y una losa de cemento pesa mucho, la verdad. ¿Motivos siniestros? ¿Cuántos millones de motivos siniestros? Y todo lo demás.
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3 comentarios:

  1. rakel31 de enero de 2010, 11:03

    Quien roba a un ladrón...

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  2. supersalvajuan31 de enero de 2010, 11:14

    Una losa de cemento. Señalar es de mala educación.

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  3. alfonso31 de enero de 2010, 11:16

    jijiji perdona que me ria
    pero todo es demasiado de peli
    y lo del cemento tipico de mafias y profesionales
    ya diran mas cosas

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