Ayer, con Juanma y Marien de anfitriones, nos comimos el niño Jesús (guiño a Karol) y nos reímos un ratillo con los disfraces de rigor. Suerte innegable este año con los compañeros. Otros cursos lo añoraremos, por supuesto. El Medievo y unos gintonics.
Y acabamos en el bar de rigor para regar bien los intestinos, como tiene que ser.
Ni España ni, por lo que se ve, los españoles ya no son lo que eran.
ResponderEliminar¡Viva el Cid!
Campeador, claro está
jajajaja...qué bueno, pues yo tengo un disfraz de mesonera...qué ni te digo...
ResponderEliminar¡Eso,vivael Cid! El Cid, Salvador
;)
Que bien lo pasáis. Me alegro.
ResponderEliminarEa, qué viva el carnaval!!!!(el de Águilas que viva más)
ResponderEliminarEsta vez también pasastes por un chino a comprar??jajaja
¡Qué buen disfraz!
ResponderEliminarUn beso.
Cagontó, qué favorecío estás
ResponderEliminarAdu, el Cid, y, sobre todo, Sofía Loren.
ResponderEliminarAnele, y Jimena.
Vf, siempre hay que pasarlo bien.
Maica, no te digo nada.
Mar, siempre hay algo a mano.
Rubén, el Medievo tenía muy pocas ventajas, pero el tiempo lo hace todo.
Descubrí a los niños mutantes con la canción que has puesto. Estoy de acuerdo con Rubén.
ResponderEliminarPijo,¿y el cuello del niki?.
ResponderEliminar¿Se liga más de medieval o de tetris?.
Rakel, de ninguna manera.
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