Ya. Ya lo sé. Vendrá alguno y me dirá que la he puesto. Tres. Cuatro. Cinco Veces. Pero me hace falta ponerla. Porque sí. Porque siempre es necesario saber que todo lo que tocas se rompe. Y, cuando se rompe, adiós. Y punto.
Hola, amigo. Paso por aquí a saludarte y a decirte que un pasaporte sólo merece ser quemado en un buen fuego de una chimenea de mármol. Por eso no quemo yo el mío. Por eso y por si se me ocurre irme a Marruecos, es un ejemplo. Besicos.
se merecen quinientas y mil veces... y muchas más...
ResponderEliminaresas voces y esas palabras...
y todo lo demás no importa en realidad...
Hola, amigo. Paso por aquí a saludarte y a decirte que un pasaporte sólo merece ser quemado en un buen fuego de una chimenea de mármol. Por eso no quemo yo el mío. Por eso y por si se me ocurre irme a Marruecos, es un ejemplo. Besicos.
ResponderEliminarLA VIRGEN SANTA QUÉ PEDAZO DE TEMA MAS BRUTALÍSIMO, COPÓN!!!!!
ResponderEliminarAAAAAHHHHHH!!!
Y ENCIMA VIERNES!!!!!!!
hay cosas que no se rompen amigo...
ResponderEliminarSaludos y un abrazo enorme.
Machacándolo a tamponazos y visados, cruzando fronteras frenético
ResponderEliminarPuede que roto...esté perfecto!!, así que...toca toca!!
ResponderEliminarReconstrucción http://www.youtube.com/watch?v=d6S1ONH7788
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