He hablado por lo menos 3 veces aquí de Agustín Fernández Mallo, y como en la historia musical de todos nosotros, hemos pasado, a la inversa, de la felicidad a la tortura. El señor Fernández Mallo, en su altarcito de genialidad, quiso engatusarnos con una obra genial como Nocilla Dream, pero sus secuelas no estaban a la altura de ese rascacielos, la verdad. Este Carne de Píxel, con traje de publicación de 2009, muestra a un AFM más real, al más sentimental, también al más poético. Además, con el éxito de citar a
También CDP es una reflexión sobre el amor, ese tren pasajero en del que te bajas cuando menos te lo esperas porque nada es eterno, nada es como tú crees que es. Y luego está el día a día, que ilustrado en palabras por AFM se muestra como es, “lo más difícil de narrar es el presente”. Y hay ojos que es imposible olvidar.
Y luego vienen más preguntas. ¿Existen los martes? ¿Lo que ocurrió aquel martes es cierto? ¿Es real? ¿Hay que acordarse de todo es bueno no recordar? ¿Hay memoria selectiva? ¿Sabes estar con alguien en silencio? Puedes sentir, y pensar, pero no hace falta joderlo todo abriendo la boca.
Y la luz, y el ansiado beso. Y las manos apretadas, y un adiós en mitad de la noche. Y el espectro de Autrey Hepburn, siempre como modelo. Porque hay días en los que la perfección sí existe. Pero el miedo sigue existiendo, años enteros. Y la alquimia borgiana. Silencio, frío, cercanía, fusión, y una costa unos días apetecible y otros despreciable.
También ha aparecido alguna vez Organ por Gintonicdream. Otra música común, otro momento de olmo cansado preparado para la sequía. Lluvia y llanto a la potencia máxima. Y los límites, siempre los límites, “los hábitos mediocres” de los que había AFM. Y unas botas de punta inolvidables.
Hay gente con la que pasas fotos, días, meses, incluso años pero con los que eres incapaz de hablar de ciertos temas, la incapacidad es manifiesta. Y la gaseosa siempre es un espejismo. Y yo no le leído a Burroghs, aunque ayer el hombre de la camisa verde me lo recomendó (y también me dijo que no volvería a leer en su vida). Muertes inmortales y todo lo demás.
Si aún no lo has hecho quizá ya estés mayor para comenzar a leer a Burroughs. Espero que no lean este blog tus alumnos porque la confesión es imperdonable y “todo lo demás”. Puedes leer “Yonki” como una curiosidad histórica, pero yo te aconsejo que empieces por “Ciudades de la noche roja” o “El almuerzo desnudo”.
ResponderEliminarRecuerdo que yo lo leí en la mili, entre garita y garita y carajillos de coñac. Así se me quedó la neurona, mareada.
La gaseosa desvirtúa, y si no tiene chispitas envenena.
Disculpa el atrevimiento, molas.
(*) Google es muy intuitivo, sí, el código de verificación es: "iranova". "Nova Spress", déjalo para cuando empieces a fumar.
Vaya, vaya....pues parece que vamos teniendo opinión...
ResponderEliminarBeso
;)
a mi me gusta mas la nocilla untada en galletas maria
ResponderEliminarrica rica¡¡¡
No me terminan de convencer las páginas de AFM, además de que desconfío de la gente que tiene más ojeras que yo, así que...
ResponderEliminarNecro, este verano empezaré el Yonki, lo prometo, o quizás siga el orden de la recomendación. ¿La mili? Yo me libré por los pelos.
ResponderEliminarAnele, opinión, lo que se dice opinión...
¿Nocilla blanca o negra?
Rubén, no me hables de ojeras, que entonces soy el ganador...
Niño, la primera edición de Carne de pixel es de Marzo de 2008.Le dieron un premio en 2007, creo.
ResponderEliminarBuena reflexión, la mía se que da en pañales en comparación.
Trángenico zumo... http://www.youtube.com/watch?v=eRscQ503YJs