Un profesor de la Facultad nos contó que don Dámaso Alonso, estando un día de visita en Murcia por fechas primaverales, probó los paparajotes... y nadie le advirtió de que la hoja interior no se come. Los notó (eso dijo) más bien amargos.
¡Ay qué ricos!... ¡Qué buena fotografía!... Puedo hasta olerlos.
Lo que comenta Rubén que le sucedió a Dámaso Alonso, puedo le ha pasado a muuucha gente. He sido testigo de ello y, desde entonces, cuando algún forastero viene a nuestra tierra y pide paparajotes, le aviso con antelación que la hoja de limonero NO SE COME...
Un profesor de la Facultad nos contó que don Dámaso Alonso, estando un día de visita en Murcia por fechas primaverales, probó los paparajotes... y nadie le advirtió de que la hoja interior no se come. Los notó (eso dijo) más bien amargos.
ResponderEliminar¡Ay qué ricos!... ¡Qué buena fotografía!... Puedo hasta olerlos.
ResponderEliminarLo que comenta Rubén que le sucedió a Dámaso Alonso, puedo le ha pasado a muuucha gente. He sido testigo de ello y, desde entonces, cuando algún forastero viene a nuestra tierra y pide paparajotes, le aviso con antelación que la hoja de limonero NO SE COME...
Besos y felices Fiestas.
¡Dios!... ¿Qué he escrito?... Me dio hambre y me comí después de "puedo", "decir que"...
ResponderEliminarOtro beso.
Ah, pues yo no he probado eso ¿Está rico?
ResponderEliminar;)
rico,rico,rico....delicius!!
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