domingo, 22 de junio de 2008

¿El país de las maravillas?

El viernes, leyendo GU, citaban esta frase de Thomas Sowell, recogida de un artículo publicado el día 9 en Libertad Digital: "En la universidad, admitir a estudiantes negros rebajando los criterios impuestos a los demás tiene por objeto que se vea su presencia en el campus. Da lo mismo que la consecuencia sean unas elevadas tasas de abandono al no encajar académicamente en el centro en cuestión. Los estudiantes negros que no logran aprobar son reemplazados por otros, y cuando muchos de ellos no logran aprobar, se buscan más". La otra cara progre de los USA.

5 comentarios:

  1. Vaya con el Sowell ese... La verdad es que es de cuidado, a mi parecer. Una gran reserva intelectual de la ideología neocon. Quizás tú estés de acuerdo con él. Yo no puedo estarlo. Lo siento. Y de USA, ¿qué decir? Muy progres siempre. Pero lo de las cuotas o la discriminación positiva, que tiene sus pros y sus contras, siempre es relativo. Depende cómo se haga, que depende de cómo se legisle. De todos modos, casi siempre se hace de un modo apariencial, para lavarse la cara. Las mujeres lo sabemos, porque sabemos los niveles de exigencia que se tienen con nosotras.

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  2. Si al final, las universidades americanas se meten con Harold Bloom y tiene más razón que un santo. Pero parece ser que no sólo lo hacen con los alumnos: la selección del profesorado en las universidades es muy similar. Si eres mujer, afroamericana, homosexual y judía, lo más seguro es que te contraten. Es una exageración, pero que se llegue a decir eso es muy heavy.

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  3. Clares: el afroamericano (yo digo que negro) habla de cuotas. Yo lo que digo es que si hay 10 negros más listos, no tiene que haber más blancos en la universidad. Y viceversa. Nunca me han gustado las cuotas. Y para cuantificar ya está la Cliometría (Nueva Historia Económica), con Conrad y Meyer.
    Madame tafetán: con fundaciones como la John Olin, que se puede esperar. Han tomado referentes como Furet y compañía. El fin de la Historia, y Fukuyama, y todas esas tonterías. Es lo que hay.

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  4. Qué absurdo, ¿verdad? Al borde del delirio: necesitan presencia multicolor en el campus, y si no funciona, otros les suceden. Es como equilibar en el color en un acuario: si palman los ejemplares oscuros, vas a la tienda y compras un par más, XDDD.

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  5. Equlibrar el color en un acuario.

    Aag!, odio que se me cuelen errores en un comentario.

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