Juan Manuel, yo quiero que me subvencionen mis hobbies. Pero no lo hacen. Ahí está la diferencia. Hasta que no exista una industria, lo del cine español es una alucinación.
Es cierto es de las industrias que subsisten en este país gracias a la subvención, por cierto, mas cuantiosas que sus ingresos, ¿paradógico no? pero como a eso lo llaman cultura. Por cierto ha sido un descubrimiento tu blog, te enlazo.
¿Y los criterios para esa subvención? ¿La rentabilidad? Evidentemente, no todas las pelis hacen dinero. El problema es que aquí difícilmente se recupera.
Los criterios son parecidos al resto de países de nuestro entorno (salvo USA, que es más sibilino). Y precisamente como la rentabilidad (y las escasas oportunidades de exhibición en salas, sujetas a la presión de las distribuidoras estadounidenses) existe la figura de la subvención. Que no son otra cosa que ayudas al sector: para al menos poder producir.
Cierto, toda una lección de cine, por eso triunfan los Barden, por que nos tienen a todos pendientes de su próxima gilipollez. Es muy bueno saludos.
ResponderEliminarJuan Manuel, yo quiero que me subvencionen mis hobbies. Pero no lo hacen. Ahí está la diferencia. Hasta que no exista una industria, lo del cine español es una alucinación.
ResponderEliminarEs cierto es de las industrias que subsisten en este país gracias a la subvención, por cierto, mas cuantiosas que sus ingresos, ¿paradógico no? pero como a eso lo llaman cultura.
ResponderEliminarPor cierto ha sido un descubrimiento tu blog, te enlazo.
Igualmente. Y, ya que no hay soluciones, nos quedaremos con las promesas.
ResponderEliminarEl cine español fuera de España goza de una magnifica reputación, que es exactamente la que se le niega aquí.
ResponderEliminarSi todos los grandes países europeos subvencionan su cine ¿por qué hemos de ser diferentes y competir desigualmente?
¿Y los criterios para esa subvención? ¿La rentabilidad? Evidentemente, no todas las pelis hacen dinero. El problema es que aquí difícilmente se recupera.
ResponderEliminarYa sabes, ¿qué hay de lo mío
ResponderEliminarLos criterios son parecidos al resto de países de nuestro entorno (salvo USA, que es más sibilino). Y precisamente como la rentabilidad (y las escasas oportunidades de exhibición en salas, sujetas a la presión de las distribuidoras estadounidenses) existe la figura de la subvención. Que no son otra cosa que ayudas al sector: para al menos poder producir.
ResponderEliminarme falta: es precaria
ResponderEliminar"... y como la rentabilidad es precaria..."
Muy bueno el vídeo... gran lección...
ResponderEliminar¿Cuañes son esos países que admiran tanto el cine que hacemos? (en recaudación, claro, que si no estamos en las mismas).