Durante un par de mañanas, me acerco al Togo y, entre tanque y tanque, procuro leerme la columna de Santiago González. Ayer, como no pude, entré en su blog, y escuché el claro ejemplo del principio de Peter. Pajín, habla de "conyugues". ¿Cónyugues? Pero qué mierda!!! ¿Nadie le dice nada? ¿Presunción de inocencia? Lo dice Santiago González, y es verdad. Se puede ser un mal marido, o una mala esposa, pero se puede ser el mejor padre o la mejor madre del mundo. Y punto.
Quizá la confusión venga de que el origen etimológico de "cónyuge" es designar a dos que van con el mismo yugo. Y como Pajín conoce perfectamente las lenguas clásicas es posible que el subconsciente le haya jugado una mala pasada.
Presunción de inocencia...? que nooooo
ResponderEliminaracuerdáte de no borrar weeds!!
ResponderEliminarte debo dinero,chato.
Joé!! tranquilo...vamos a darle una oportunidad!!...vamos a esperar a que acabe la carrera, hombre!!
ResponderEliminarNo había pensado en enfocarlo desde ese punto de vista...
ResponderEliminarbien reflexionado si, pero que muy bien... habrá que pensarlo
Hiperión, tenemos una líder!!
ResponderEliminarNurse jackie, guisante!!!
Atila, ¿la carrera?
Felipe, pensar te mete en líos
Quizá la confusión venga de que el origen etimológico de "cónyuge" es designar a dos que van con el mismo yugo. Y como Pajín conoce perfectamente las lenguas clásicas es posible que el subconsciente le haya jugado una mala pasada.
ResponderEliminarTienes razón, Rubén. Será eso.
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