jueves, 12 de septiembre de 2013
Soutcliffe. Primera temporada
Hoy no me pongo del lado de Josele Santiago y de Fino Oyonarte: hoy me pongo del lado de los guionistas de Southcliffe. Vaya panda de hijoputas los del canal 4 británico: ponemos en un altar a Misfits, y Utopía, y Oona Chaplin en Dates. Y lo que nos nos llega en condiciones. Nosotros en el jergón y no nos queda nada. Casi nada. No nos queda aliento después de Soutcliffe. Casi nada. Ni en el jergón ni en la casa de su puta madre. Así. Hay demasiado rencor británico en Southcliffe. Demasiado. O, a lo mejor se miran al ombligo. Se dejan mierdas de media tinta. El pasado. La mierda. Soldados exprofesionales. Políticos de mierda casi inadvertidos. Y eso me da envidia. Los políticos siempre son mierda pero a veces nosotros somos lo culpables, como casi siempre, como nos decían en Secret State. La tengo desde un altar. A lo mejor es el desempleo o la lucidez taciturna, o las abuelas degenerativas, o las niñas que salen a correr sin hablar con nadie, o los padres que tienen a sus niñas en sus altares, o los silencios de los bares, o la mierda embotellada. No lo sé. Pero la primera temporada de Soutcliffe es inigualable. He dicho inigualable.
Qué dices que te da envidia? Los políticos de mierda casi inadvertidos?
ResponderEliminarNo me entendéis bien. O me explico mal, será eso.
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