viernes, 11 de octubre de 2013

Viernes Magallenístico

Con la medida del circuito de nuestro planeta, perseguida en vano desde hacía mil años, la Humanidad adquiere una nueva idea de su capacidad, puesto que, en la magnitud del espacio ganado, se le revela, acrecentando su gozo y su valor, la propia grandeza. El hombre da lo mejor de sí con un ejemplo, y si hay un hecho que pruebe algo es el de Magallanes que, contra todo olvido, traspasará los siglos para dar testimonio de que cuando una idea vuela con las alas del genio, cuando se lleva adelante denodadamente y con pasión, es más que fuerte que todos los elementos de la naturaleza; y que está destinado siempre al hombre único, a un individuo con su menguada vida fugaz, el poder convertir en realidad y en verdad perdurable lo que ha sido un deseo soñado durante las cien generaciones que le precedieron. Stefan Zweig, Magallanes