sábado, 20 de enero de 2018

Deadwood. Tercera temporada.

Sermones y guaridas, diligencias y abortos, discursos y elecciones, más putas y más alcohol, versículos de San Mateo y locuras transitorias, sed de sangre y martillazos en la mano. Sorpresas en mitad de ningún sitio en la tercera temporada de Deadwood. Ya lo dice el versículo: "Todo pecado y blasfemia será perdonado a los hombres; mas la blasfemia contra el Espíritu no les será perdonada". Voluntades impuestas. Galeses muertos. Chinos de vuelta. Rejas para todos. Y los tratos para el color. Contrariedades y dulces que a veces amargan. Latas para alimentar el alma y el estómago. Infecciones. Y vuelta a la locura. Y la tuberculosis, y los pañuelos, y las cartas, y el papel de la prensa. Nos hacemos viejos. Todos. Pero en aquella época todos casi que nacían viejos. Pero los que llevan el peligro en la sangre siempre estarán en la picota. Siempre. Elecciones, calendarios, imprentas, periódicos, neutralidad. Opiniones que hay que guardar. ¿Esconder cobardía bajo ciertos principios? Que no falten calendarios, que no falten bares, que no falten historias que contar, que no falten dedos en las manos y pañuelos con que cubrirlos. Y esa lucha por un oro que lleva al más absoluto de los desastres, a la locura colectiva, al enfrentamiento final de un territorio que huele a demasiada mierda, a demsiado barro, a demasiado alcohol. Robar para adornar un escenario macabro, un decorado de locura y desesperación. ¿Confundir miedo con preocupación? ¿El miedo está en el alma del hombre? ¿De verdad nos hacemos estas preguntas? La democracia y el artículo 15 de la Constitución yanqki, y los votos y la papeleta y todo lo demás. ¿Tenemos carácter o el carácter nos posee? Deadwood no deja puntos suspensivos. Deadwood pone los puntos sobre todas las vocales. Vida, soledad, montañas que escalar, oro y más oro. Antes de huir, toca poner el vaso boca abajo. Siempre hay ataúdes que llenar, siempre sangre que limpiar, siempre periódicos que leer. ¿Dormir bien? ¿No creerte un héroe? ¿Escapatoria? ¿Ilusión?