miércoles, 28 de abril de 2010

De la monarquía a la criptocracia.


Simplemente, genial. Así es lo último de Triángulo de Amor Bizarro. Si ya les tenía adoración por El himno de la bala (si algún día el corazón me aguanta y tengo un programa de radio se llamará así [ya presenté un proyecto con ese título, por cierto]), después de estar escuchando la última hora y pico de De la monarquía la criptocracia me quedo sin adjetivos. Una canción de esas que vamos a corear hasta el infinito, de reflexión meditativa (“¡¡¡todo es mentira!!!”), de lectura hasta al mínimo detalle. A veces uno tiene que ir, olvidar, hincar la rodilla, soñar que cree que se puede salir de esa pesadilla que es el día a día. Se puede intentar; lograrlo, utopía. La línea discontinua vital, cual carretera secundaria cutre, normalmente acaba en un barranco que es una solución como otra cualquiera, como unas venas de las que sale sangre morcillera. La órbita universal es un tortuoso camino, un párrafo desviado en ese autobiografía que ningún nieto debe saber que existe porque has sido borrado como un recuerdo asesino, como una leyenda negra familiar. Las sociedades secretas femeninas y todo lo demás, página a página, línea conclusiva a línea conclusiva, duda tras duda (“¡¡¡todo, todo es mentira, como siempre ha sucedido!!!”). Y siempre habrá un mañana en el que explicarlo todo, esa mentira se sabrá, tal vez, el milenio que viene. Y me duelen las rodillas, y recuerdo un sábado de septiembre de 2008, con una caja, transportando algo que no deberíamos haber transportado. Pero la vida es así, y se ilustra con palabras, y con imágenes, y con cortinas manchadas de sangre, y con esa estrella que no hay que coser en la manga izquierda de un abrigo en Cracovia, ni en una rosa primaveral que pincha hasta su putrefacción. Las raíces levantan las aceras como el alma se vuelve negra. La visión óptica, gafas de viaje galáctico que todo lo desafía. Ornamentos divinos, santos óleos, formas consagradas, vinos de corazón de azúcar, rituales que nos enseñan que vivimos en esa mentira de vida que son los modas envejecidas que una tras otra nos obligan a firmar en documentos y ayuntamientos, en iglesias y juzgados, en neuronas engañadas por unos momentos de penitencia pública. Pero el terciopelo rojo siempre se mancha, que te quede claro, no queda impoluto, siempre encuentras restos de algo que no debería estar ahí, justo ahí, en ese jodido sitio. Los coros te llaman pero tú no quieres escuchar; los coros te aclaman pero tú te cansaste en tus súplicas; los coros te avisan pero esa vela te ha hipnotizado con la mentira. Con la gran mentira. Y mañana seguirás siendo el mismo borrego de todos los días. De mentira de la buena, te lo digo yo y la Dirección General de Tráfico. Y punto.

Coda: el video, genial, se puede ver en la sección de cultura de El País y en su myspace.
Coda 2, momento Olic del día con sangre en la oreja:
“Arréglame, arréglame, arréglame, arréglame, arréglame, arréglame, arréglame, arréglame, arréglame…después yo lo explico. Qué siemplemente te has ido…”
Coda 3: Chaíto!!!

6 comentarios:

Eme (Nada que ver con eme dj)) dijo...

veo que últimamente repites mucho una palabra empieza por "..." http://www.youtube.com/watch?v=OfIgtaJ2kf0
por qué será...

y además te sales de tu tónica general de prosa y saltas al verso, pero no cualquier verso sino un tipo concreto de un cierto estilo que suele aparecer mucho en otro lugar del mundo blog... por qué será...

rakel dijo...

Eme, cuéntamelo todo,todo,todo...
Que el Super me sale por los cerros de Úbeda.

rakel dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
rakel dijo...

Yo que te conozco desde hace tiempo,o eso creo,sé que ambiguo,lo que se dice ambiguo,no eres.
Me lo demostraste un 14 de Octubre de hace 8 años y pico.
Aunque luego se te escurriera la cerradura entre los dedos...

Anónimo dijo...

Este grupo no es de los mios, pero la canción es genial.

Por cierto, que yo ya creía uqe esto era un programa de radio.

supersalvajuan dijo...

Amor, el disco es muy distinto al primero, suena bestial (y si haces deporte, cosa que yo no, te pone las pilas). A ver si me dejo ya la docencia y me pongo a trabajar en algo distinto.
Jeje con lo del programa!!!