sábado, 25 de febrero de 2017

PB al poder

Ayer estaba en clase, elevado al cubo porque hubo triplete de segundos, hablando del arado normando y de la collera y de la cuchilla y de las herraduras con clavos y me vinieron, cuchillas arriba cuchillas abajo, las gorras de los Peaky Blinders a la memoria. Derivó matemáticamente el asunto en discursos sobre HBO, Netflix, Anabelle, sobre Anabelle Wallis, sobre los túneles en las batallas de Primera Guerra Mundial y las gorras con cuchillas. Vivan los viernes. Coda: Y viva el espíritu de Thomas Shelby.