domingo, 13 de abril de 2008

Tala, de Thomas Bernhard

El curso pasado, mi compañera Maribel me dejó a leer Maestros Antiguos, de Thomas Bernhard. Es una obra maestra. El tipo pasa de los puntos y aparte, pero pone a parir al personal como se merece. En Tala, pone cual hoja de perejil a la bohemia vienesa. Situada en los años 80’s del siglo XX, la excusa es una cena artística en la que un heterogéneo grupo de artistas se reúnen para despedirse de Joana, una antigua compañera de andanzas recientemente fallecida. Y en ese contexto ridículo de los bohemios, entre alcohol y más alcohol, muestran sus más bajos instintos. Sobre todo su mezquindad y vaciedad. Las personas detestables cambian cuando dicen la verdad a la sombra del alcohol. El resto del tiempo son muy falsos. Acabo de terminar de leer Tala (cuesta bastante, todo hay que decirlo). Se trata de mostrar lo que aparentemente no señalamos de los artistas. Ridiculez, inteligencia congelada, escoria de verdad, antipatía general, filosofía de papel de fumar. Al final, cuando nos encontramos con experiencias vitales que curten, nos damos cuenta de la sabiduría del viejo, de los años vividos.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

me acabo de pasar a ver tu blog

jjajajaja
1º, toda la razon en lo del rio.....pobre sardina lo que tiene que pasar ahi metida tooooodo el año... rezaremos por ella...

2º me gustan tus fotos de la catedral... ese azul del cielo es impresionante

3º. tu entrada sobre unidad de desplazamiento me ha dejado sin palabras! J y los suyos se merecen eso y mas..

y "Un buen dia"..... puffff primaveras en coxe de camino a cualkier sitio con ese temazo sonando en mi coxe.... yo sola, cantando y con el aire arreandome tortas en la cara... genial....

he estado con Erik hasta las seis
y nos hemos metido
cuatro millones de rayas
y no he vuelto a pensar en ti
hasta que he llegado a casa...

vaya biblia te acabo de dejar eh? no me odies...

jm dijo...

La verdad es que el río siempre ha sido un hervidero de mosquitos. Siempre que llega el verano y toca pasar por allí hay que aligerar el paso. Y de la sardina, mejor no decir nada

Profe dijo...

Así que no te gustaba el teléfono y ahora un Nokia N70,eh? Nunca es tarde si la dicha es buena. Por otra parte, cuando termine el libro que estoy leyendo, me dejas ese de los bohemios que se emborrachan, a ver si se nota si es Beefeater o Bombay Shapphire... :)

rakel dijo...

Pues si cuesta leerlo,será porque están todos borrachos y no se entiende lo que dicen(mira Heldmun,alias bésame,besame muchoooo)no?
Lo del altar lo dirás porque soy una santa,una hipermegasanta,ad+ lo de hiperintelectual está totalmente demostrado ya que puedo hacer 2 cosas a la vez:un IQtest y hablar por el móvil,aunque el mio no es un N70,jaja