sábado, 23 de agosto de 2008

Grand canyon.

Ayer programaron en Cinestar una gran peli, Grand Canyon, antítesis de ese “cine de autor” que todos odiamos tanto. Una peli que te impide levantarte de la silla siempre y cuando no tengas problemas de próstata. Y para empezar ponen imágenes de un Lakers-Magic, con Johnson y Skiles de bases de ambos equipos, y con la música de James Newton Howard que en España hicieron famosa Montes y Daimiel al principio de sus retransmisiones en el plus. Diálogos realistas y situaciones encontradas. El final de los 80’s mostró lo que en realidad era la falsedad del gran mito americano. La generación que antecede a la del grunge y que es hermana pequeña de aquellos hippies del final de los 60’s. Y esa es la situación que todos vivimos ahora en las ciudades de nuestro expaís, como dice Pedrulo. Guetos, calles peligrosas y gente que vive pendiente de lo que le viene por delante y por la espalda. Trata los temas que nos afectan a todos, y ante los que cerramos los ojos. Las instituciones han perdido la credibilidad, se abandonan niños en mitad de ningún sitio y el desamor está presente en todos los ámbitos de la vida. Muestra la desconfianza matrimonial. Muestra la gentuza que nos dirige, y nos propone la moda reinante, a través de un productor de cine, chusma que dice ahora el pantalón campana sí, ahora el pantalón campana no. El problema de darse cuenta de que nuestra historia genética, nuestra parentela, nuestra familia, es todo accidental, no siempre cómo querríamos. La falsedad en general, los sentimientos mal entendidos. Una peli para reflexionar bajo el aire acondicionado. Porque siempre hay un policía que te puede detener sin motivo. Porque siempre hay un hijoputa que te atraca cuándo menos te lo esperas. Porque siempre puedes encontrar algo maravilloso en mitad de la jungla. Somos bestias, pero no todos mononeuronales. Y cada uno que busque su réquiem particular. Y punto.

5 comentarios:

dani dijo...

Buena peli. Me encanta el título del blog.

supersalvajuan dijo...

El título es espiritual, una forma de vivir. Viva Steve McQueen!!!

Homo Insanus dijo...

A mí me encanta la escena en la que Richard Dreyfuss parlotea con un yonki, muy convencido de que él, el gran Don Importante, enredará con su labia al negraco. Recibe un balazo en el muslo y se mea por la pata abajo.

Es casi una metáfora, tío, es como lo que tú comentas.Lo seguros y jactanciosos que nos sentimos una minoría, como si estuviéramos por encima de cualquier mal, hasta que las otras tres partes del mundo se cabreen y nos metan ese balazo también. Y tendremos suerte si es en la pierna.

Saludos.

supersalvajuan dijo...

Creo que era Steve Martin, pero da lo mismo. El tiro se lo pegan igual, y se pasa dos semanas en una nube. Y luego vuelve a ser el mismo, aunque se queda como Romanones.

Unknown dijo...

Antes de nada... agradecerte que pasaras por mi blog y que encima dejaras un comentario. Prometo pasar con más calma para echar un vistazo a tu blog que tiene muy buena pinta. Respecto a Grand Canyon... qué decir... me encantan las pelis corales tipo Magnolia, Crash... y esta peli es una gran peli. Me compré el dvd hace un par de años y la volveré a ver próximamente. Un saludo!