El Maestro de Gramática.

Me lo dijo Alfonso hace mes y pico. Al Maestro de Gramática le había dado un ictus. Me acabo de enterar. Ayer  murió Don José Perona, el Maestro con gramática. ¿Cómo explicarlo? Mejor no explicarlo, mejor hay que leer sus artículos de prensa, y darse cuenta de la verdadera grandiosidad de este individuo a la hora de ilustrar con palabras las ideas. Un genio, un crack. Se hizo aún más grande en sus apariciones con Pérez-Reverte, el genio de las letras españolas de los últimos 25 años. Lo demás, muchas milongas. La última vez que lo ví fue en una charla con el autor de Alatriste en salón de actos de Cajamurcia, en la Gran Vía murciana. Allí fui con Antonio (Gibraltar español, Antonio). Estaba aún más sarcástico que de costumbre. Y no faltaba el azul. El azul siempre presente. El problema es que, a la altura a la que estaba, nos vamos a perder muchos de sus artículos. En la mayoría de mis trabajos de la licenciatura, iban citas revertianas y peronianas. Espejos de una Biblioteca lo repaso de vez en cuando. Es una bendita obra maestra. Lo mejor en artículos periodísticos de este país, sin duda. Su compromiso era innegable. Daba la sensación de ser un tipo claro, que decía las cosas a la cara. Me he quedado con ganas de que me lo hubiera dedicado. Si don Arturo me dedicó una "a los tercios de Salva", los Espejos deberían ir "a las azules de Salva". O algo así. Joder. Pero en fin, las cosas son así. O quizás no, vaya usted a saber. Con el profe de Historia de América, Alejandro García García, hablé varias veces de los artículos de Perona. También eran amiguetes, incluso hablamos de la fiesta que se le hizo en Claveles al maestro de Gramática. Lástima no estar aquel día por la calle Alfaro. Lástima. En fin, que siempre lo he utilizado (mis programaciones didácticas de las oposiciones, y la última unidad didáctica tenían referencias peronianas varias) y ahora más todavía. Más todavía. Por gintonicdream apareció, poco pero apareció. A partir de hoy, casi todos los días irá un pequeño homenaje. Simplemente dos recordatorios, el primero y el segundo. Y punto enlutado.