Me ha dejado el señor marqués los Ojos azules de Arturo Pérez-Reverte. La historia la conocemos todos, o, por lo menos, todos los que la conocemos. 1520. Hernán Cortés, , la jodida doña Marina (Malinche), el capitán Alvarado y todos sus secuaces tienen que abandonar Tenochtitlán. Suenan tambores de guerra, una y otra vez, una y otra vez, una y otra. Yo me lo hubiera pasado bien matando a esos putos indios. Me lo hubiera pasado bien matando. Matando en general. Matando en particular, también. Pero había que largarse. Y el soldado de ojos azules es uno de los tantos que abandonó esa España llena de gentuza y curas sin vocación, de funcionarios malnacidos que viven del cuento. Del puto cuento. Como ahora, pero sin Internet. Y el rey Carlos estaba en otros menesteres imperiales, que ya le faltaba poco para la coronación, aunque ya lo era de hecho. Y el soldado de ojos azules piensa lo que podría hacer en España, en su parte de esa puta España que compraría con el oro que cargaba. Pero lo que no puede ser no puede ser, y el vino estaba aguado, y los antepasados de Iñigo estaban ocupados. Mister blue eyes no para de pensar en la india con la que fornicó, con la india que pasó sus mejores noches mexicanas. No piensa en otra. No puede, ni quiere. Porque la vida es eso, es disfrutar y es amar. Y si a esta vida hemos venido a sufrir, a mi que me pongan otro Bombay. Azul, por supuesto. Genial pieza del maestro Pérez-Reverte. Genial pieza que estará disfrutando el Maestro de Gramática allá donde esté. Porque siempre suenan tambores de guerra. Siempre suenan, y suenan. Y ya no puedes vivir tranquilo. Sólo una cosa, que intentaré preguntar al genio cuándo pueda. Se puede ser de Cáceres. Se puede ser de Tordesillas. Se puede ser de Luarca. Pero en cuanto a Sangonera, hay que elegir: la Verde o la Seca. Y yo siempre me quedo con la verde. Y punto.
Hace 39 minutos
6 comentarios:
Para ojos azules los tuyos :)
¿Qué quieres que veamos en esos ojos azules, estás seguro de ello? recuerda a Borges, quizá veamos en ellos lo que no quieres que comprendamos, ¿o sí?.
besitos perla
Madame, merci.
Eva, tiene narices lo del gran Borges, el cegato por excelencia.
Podías sonreir una miaja!es q así se lucen más esos ojazos..azules, cómo no!
Como eres Maica. Pero sabes que no te aguanto la mirada.
El cuento de Reverte es genial... vale pagar aunque sean pocas páginas...
... debeías crear Sangonera la azul, jajaja...
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