Sí, en la plaza de toros. A todos esos imbéciles catalanes va dedicado, que ayer vimos a uno de los más fervientes seguidores de José Tomás, el más grande. Pues eso, que a todos esos chichos de la pegatina, y del resto que hicieron el paripé, digo, que va dedicada esta entrada. Y hoy no quiero hablar de los castellets, o como diablos se escriba esa historia de la que estoy esperando que intervenga el defensor del menor para evitar que mueran niños con los cuellos rotos cuando caen de no sé cuantos metros. Pero a lo que iba, que ayer acompañado de burbujas planeteras, acompañado de todo un poco, e incluso en el primer cuarto se incorporó alguna oveja negra, estuve viendo a Joaquín Sabina en la plaza de toros de Murcia. Me quedo con el caso de la rubia platino, por supuesto.
Por allí también estaban la Santa del día y su esposo el trabajador, el que va levantar la UPCT. Y entre don Jesús García y yo, siempre hay pacto entre caballeros:
También salude a otro crack, a don Damián Ros, y, aunque más de una vez estuvimos tentados en llamar a la policía cuando escuchábamos a ese manta del señor Mora que nos soplaba 140 euros al mes, no lo hicimos, Damián, aunque teníamos que haberlo hecho. Pues eso, que viva José Tomás!!!
Coda: la única vez que he escuchado a José Antonio Abellán, el periodista radiofónico más importante que ha dado este país, repetir dos veces seguidas una canción por las ondas herzianas, ha sido con Sabina. Grande Abellán, con Abellán hasta la muerte!!!
Hasta la cirrosis siempre, como diría un fallecido recientemente!!!
Coda 2: dejo la entrevista, una de las mejores que le han hecho, la de Ricardo Aguilera.
Hace 1 hora
5 comentarios:
Grande Saßina¡¡¡
;)
vaya pedazo de entrada... Muy buena... jarabe de litronaaaa(8)
PEDAZO DE CONCIERTO!!ME ENCANTÓ..!Y GRACIAS POR ESTA ENTRADA. MUAKS (NOS VEMOS LUEGO)
Anele Ouyea, no estuvo mal.
Pelipe, y las pipiolas. ¿bien?
Maica, no te digo nada.
Las pipiolas muy bien. Yo no tanto. Lo que Dios te da, Dios te lo quita. Y más si no lo agarras cuando toca... En fin. Que bien que vivimos(y vivo) los estudiantes.
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