La culpa de todo la tiene Internet. De casi todo. Antes todo eran hermanitas de la Caridad, clarisas y franciscanos. Y, por supuesto, no existía el terrorismo internacional. Claro que no.
Se lo dije al tipo del Ocaso (que por cierto, coincidí con él en el IES, pero no sé acordaba). Me preguntaba el hijoputa. Un tipo con una corbata naranja me acaba de preguntar por una persona que se acaba de morir y no conoce. Yo, en ese caso, hubiera dicho si nos ibamos de bares. Imaginad. Madrugada del viernes al sábado. 2 de la mañana. ¿Alguien puede preguntar edad, parentesco y jodiendas varias? Va a ser que no. Pues eso. Que los 5 féretros eran una puta mierda. Cartón/piedra de mierda. Una puta mierda. Y todo lo demás.
O mejor dicho, menuda cruz. En este país de ineptos, en este reino valcarcil de posibilidades infinitas, si piensas o haces pensar te puedes meter en un lío. Menuda cruz.