Hace 2 horas
viernes, 30 de octubre de 2009
Un plan para el viernes.
El viernes. Momento de reflexión calorífica. Cosas que hacer:
- Flotar.
- Respirar aunque el cuerpo a veces no quiera.
- Escuchar a The Sunday Drivers.
- Ascender.
- Bajar de golpe de nuevo.
- Buscar un gorro blanco.
- Dar la mano.
- Buscar un plan B por si el plan A falla.
- Levantar los meñiques.
- Crujir guitarras.
- Elevar estribillos al cielo del paladar.
- Coger globos, y volver a soltarlos.
- Armonizar gestos.
- Dar volteretas.
- Soñar con un plan C por si el A y el B son una mierda.
- Derretir el espejo en que me miro.
- Desechar fotos que no quiero volver a ver.
- Y todo lo demás.
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3 comentarios:
Yo pienso tirarme las próximas dos o tres horas leyendo a Roberto Bolaño. Le cogí manía cuando leí "Los detectives salvajes" y quiero comprobar si la mantengo con los otros libros suyos que tengo aquí encima (el primero, "Una novelita lumpen") o se la retiro.
Los detectives salvajes es un libro interminable, demasiado hilo a la cometa. ¿No se daba cuenta el tipo que no hacía viento?
Yo estuve trabajando hasta tarde. Ni Los detectives salvajes, ni buscar un gorro blanco, ni todo lo demás. Me llevé la palma
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